Y el que reciba a un niño como éste en mi nombre, a mí me recibe.
Pero al que haga tropezar a uno de estos pequeñitos que creen en mí, mejor le sería que le colgaran al cuello una piedra de molino de las que mueve un asno, y que se ahogara en lo profundo del mar.
Mateo 18 5-6
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