El presidente de EE.UU., Joe Biden, visitó Hawái, donde fue recibido con protestas por su respuesta tardía e ineficaz a los incendios que dejaron más de 100 muertos.
Dos semanas después de los incendios en Mauí, en Hawái, Biden, acompañado de su esposa Jill, visitó la isla, mientras que los lugareños los recibieron con gritos de “¡Joe, vete a casa!”, ha informado este martes el periódico británico Daily Mail.
En su estancia de cinco horas, Biden, tras visitar algunas zonas damnificadas, dio un discurso confuso en lo que de manera sorprendente comparó los incendios forestales de Hawái, que dejaron al menos 114 muertos y centenares de desaparecidos, con el incendio que ocurrió en 2004 en la cocina de su casa en Delaware.
Por otro lado, la caravana del presidente fue recibida con insultos por los habitantes de Maui, la segunda isla más grande de Hawái, en la cual fue destruida totalmente la histórica ciudad de Lahaina.
Asimismo, Biden durante esta visita hizo algunas bromas con un grupo de rescate que agravó la ira de los ciudadanos indignados.
Los residentes y políticos de Hawái critican a Biden por su demora en visitar esta isla y los cheques de 700 dólares que había ofrecido a cada familia afectada, mientras que desde la operación especial de Rusia en Ucrania en 2022, EE.UU. ha ayudado más de 12 millones de dólares a este país europeo.
Además, los habitantes de Maui expresan su frustración por la falta de rapidez en la búsqueda de los desaparecidos y en la identificación de los cuerpos. Según el gobernador de Hawái, Josh Green, más de 1000 personas siguen desaparecidas, y es probable que entre ellas haya muchos niños.
El jueves pasado, Ella Sable Tacderan, una ciudadana de Maui, en su entrevista con CNN, culpó a Biden de no tratar a su familia como ciudadano estadounidense y preguntó: “¿Dónde está el presidente? ¿No somos también americanos? Somos parte de EE.UU., ¿Por qué nos ponen en el bolsillo trasero?”.
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