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jueves, 9 de enero de 2014

¿Qué es el vórtice polar que azota a EE.UU. y Canadá?

Fuente: http://www.bbc.co.uk/mundo/noticias/2014/01/140107_ciencia_que_es_vortice_polar_np.shtml
http://wscdn.bbc.co.uk/worldservice/assets/images/2014/01/07/140107152724_north_america_freeze_976map_spanish.jpg
Las imágenes de los efectos que la ola de frío está provocando en Estados Unidos están dando la vuelta al mundo, y en muchas de las noticias se menciona a un culpable: el vórtice polar.¿Pero qué es exactamente?.
 
 
Los vórtices polares son fenómenos climáticos que están presentes todo el tiempo: áreas de aire giratorio sobre los dos polos, que se ubican en la media y alta tropósfera y la estratósfera, y que se mueven a diferentes velocidades. Gracias a ellos, el aire frío y denso se mantiene sobre los polos.
Son ciclones permanentes que se hacen más fuertes y amplios en los inviernos y se debilitan durante los veranos.
Tal como explica John Hammond, del centro meteorológico de la BBC, múltiples factores climáticos hacen que ese aire frío "encerrado" por el vórtice polar se libere repentinamente, y descienda hasta las capas inferiores de la atmósfera, provocando los estragos que padecen ahora los habitantes del noreste de América del Norte.
 
 
Corriente de chorro
Sin embargo, Alex Deakin, otro experto meteorólogo, cree que lo que está sucediendo tiene más que ver con otro fenómeno que ocurre en lo alto de la atmósfera: la corriente de chorro polar, un fuerte y estrecho flujo de aire concentrado. Deakin explica que el aire frío ha estado sobre Canadá desde hace varias semanas, mientras que en Estados Unidos las temperaturas han sido relativamente suaves.
Ese contraste, explica Deakin, es lo que impulsa a la fuerte corriente fría que mueve áreas de baja presión a través del centro de Estados Unidos hacia la región de los Grandes Lagos y el noreste del país.
Mapa de la corriente en chorro del Polo Norte
La corriente en chorro del polo norte ha mostrado últimamente algunos cambios en su ruta.
 


Esos sistemas de baja presión han producido las grandes nevadas que se han visto. Pero detrás de las últimas de esas áreas de baja presión, dice Deakin, viene el aire frío de verdad: los vientos glaciales están haciendo descender el aire frío, que efectivamente proviene del polo. La fuerza del viento sumada al aire extremadamente frío es la que está causando problemas.
Las temperaturas de menos de -26 ºC se han visto intensificadas en decenas de grados más allá del punto de congelación a causa del viento, algo que supone un peligro para quienes salen a la intemperie: uno puede congelarse en cuestión de minutos.
http://wscdn.bbc.co.uk/worldservice/assets/images/2014/01/07/140107152723_frostbite_temperature_guide_624gr_spanish.gif
La ola polar está dejando récords históricos: este martes, en Winnipeg, la capital de la provincia canadiense de Manitoba, se registraron -34 ºC, pero a causa del viento helado, la sensación térmica llegó a -47ºC. No hacía tanto frío desde 1966, cuando los termómetros marcaron -40.6°C.
Además, y gracias a la corriente, el frío ya no está confinado a la región de los Grandes Lagos, sino que se extiende hacia al sur y llegará tan lejos como hasta Texas.


Fuente: http://sociedad.elpais.com/sociedad/2014/01/07/actualidad/1389118849_709477.html

A temperaturas tan bajas todo el cuerpo debe estar protegido.
La hipotermia es el efecto más grave.
 
 
Hablar del efecto del frío es fácil con alguien acostumbrado a ir a la montaña, como la directora del Instituto de Medicina de Montaña y del Deporte, Anna Carceller. Claro que todo depende de la protección que se tenga. “A menos 30 grados, la temperatura a la que se ha llegado en partes de EE UU, una persona mal preparada se congela en un minuto”, afirma.
Y no hace falta que haga tanto frío. La sensación, y sus efectos, se multiplica hasta 14 veces si hay humedad, y más de 30 si hay agua. El viento tampoco ayuda, indica Carceller.
 
 
“El frío duele”. La médica contesta a EL PAÍS justo después de bajar del Pirineo oscense. “Siempre he ido muy protegida, pero una vez -y fue culpa mía-, aunque llevaba guantes, no eran impermeables, y las manos tardaron un par de semanas en recuperarse”. Guantes, gorros, máscaras… la protección es fundamental, insiste. “La ropa tiene que ser la adecuada. Hay que llevar varias capas, tres o cuatro, más algo para parar el viento”, dice.
 
 
Los efectos de no estar bien acondicionados son dos. “Uno, todo lo expuesto se hiela. La nariz, las orejas, las manos, los pies son las zonas más susceptibles de helarse. El frío entra como agujas. Pero son zonas periféricas y, si todo va muy mal, se soluciona cortando”, dice con resignación. En cambio, la hipotermia “supone un riesgo vital”. “El cuerpo humano está a unos 37 grados.
Cuando hace mucho frío no somos capaces de generar el calor suficiente, y nos vamos enfriando”, explica Carceller. Por debajo de los 35 grados aparece la hipotermia.
Los síntomas empiezan por temblores, tiritonas. “Los movimientos se vuelven más lentos, se razona peor”, dice la experta. La pérdida de la consciencia es paulatina. Las manos se entumecen. “Uno no se da cuenta de que se está muriendo. Por eso sa la muerte por congelación se le llama la muerte dulce”. Pero el organismo tiene sus defensas. Cuando no puede calentar todo el cuerpo, se concentra en el tronco, en los órganos vitales. Por eso esa es la zona que hay que calentar preferentemente.
 
 
Otras medidas a tomar con comer adecuadamente (meter calorías), hidratarse, no beber alcohol (que es un vaso dilatador y, por tanto, ayuda a perder temperatura), no fumar (tiene un efecto similar en los pulmones), y aislarse del suelo frío, indica Carceller. Parece la guía de lo que una persona con pocos recursos tiene más difícil hacer: buena ropa, buenos alimentos, un buen entorno convenientemente aislado. “Por eso los indigentes son los más perjudicados en las olas de frío”, afirma la médica.
Pese a todo, Carceller afirma que ha visto casos sorprendentes. El cuerpo humano tiene una extraordinaria capacidad de resistencia. “Cuando hace mucho frío, las funciones vitales se ralentizan”.
Así, quien puede parecer muerto por congelación a lo mejor revive al recuperar la temperatura. Por eso “los médicos decimos que un muerto no lo está hasta que vuelve a estar caliente”.

Visto:  http://apocalipticus.over-blog.es/

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