Domingo 22 de Julio de 2012, 09:26 am
Cerca de un millar de indígenas colombianos del
municipio Toribío (oeste) decidieron este sábado, tras ejercer su
derecho a la jurisdicción especial, aplicar a cuatro miembros de las
Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) un castigo de entre
10 y 30 fuetazos (latigazos).
La corresponsal de teleSUR en la nación suramericana, Angie Camacho, reportó que tras varias horas de deliberación, la comunidad decidió sobre la base del derecho propio y encontraron que los cuatro insurgentes retenidos pusieron en riesgo a los habitantes de la región.
El proceso, reconocido por la Constitución colombiana de 1991, se celebró en un colegio de Toribío lugar donde la comunidad aborigen determinó cual era el mejor remedio para los procesados.
El gobernador del resguardo de Toribío, Marcos Yule, detalló que los subversivos fueron fustigados en la mitad inferior del cuerpo. “Los adultos recibieron los 30 (fuetazos) pero el menor de edad no resistió los diez y se le bajó hasta la mitad (cinco) porque lleva menos tiempo y tiene 16 años”, precisó.
Agregó que una vez cumplido el castigo no fueron entregados a la justicia ordinaria, sino regresados a sus familiares que son quienes deberían recomponer sus caminos.
Por su parte, una de las autoridades nativas explicó que los hombres no reciben castigo por ser rebeldes de una organización armada, “es su decisión de pertenecer a esos grupos u otros, sino porque pudieron ocasionar un ataque de la Fuerza Pública contra la comunidad”.
La guardia indígena de Toribío detuvo a los miembros de las FARC el pasado miércoles con fusiles y explosivos en la zona montañosa de la región, cuando intentaban atacar a agentes de la Fuerza Pública, por lo que fueron trasladados a un local del casco urbano de esa población.
El juicio público realizado la víspera se basa en la jurisdicción especial indígena que existe en Colombia y que también reconoce la autonomía a la cual apelan los nativos para tratar de expulsar de su territorio ancestral a los actores del conflicto.
Bajo ese precepto los indígenas han tratado de expulsar a grupos armados legales o ilegales de la región lo que ha causado disturbios en el norte del Cauca (oeste) y propiciado un diálogo formal con el Gobierno Nacional que arrancará este lunes.
fuente:Aquí
La corresponsal de teleSUR en la nación suramericana, Angie Camacho, reportó que tras varias horas de deliberación, la comunidad decidió sobre la base del derecho propio y encontraron que los cuatro insurgentes retenidos pusieron en riesgo a los habitantes de la región.
El proceso, reconocido por la Constitución colombiana de 1991, se celebró en un colegio de Toribío lugar donde la comunidad aborigen determinó cual era el mejor remedio para los procesados.
El gobernador del resguardo de Toribío, Marcos Yule, detalló que los subversivos fueron fustigados en la mitad inferior del cuerpo. “Los adultos recibieron los 30 (fuetazos) pero el menor de edad no resistió los diez y se le bajó hasta la mitad (cinco) porque lleva menos tiempo y tiene 16 años”, precisó.
Agregó que una vez cumplido el castigo no fueron entregados a la justicia ordinaria, sino regresados a sus familiares que son quienes deberían recomponer sus caminos.
Por su parte, una de las autoridades nativas explicó que los hombres no reciben castigo por ser rebeldes de una organización armada, “es su decisión de pertenecer a esos grupos u otros, sino porque pudieron ocasionar un ataque de la Fuerza Pública contra la comunidad”.
La guardia indígena de Toribío detuvo a los miembros de las FARC el pasado miércoles con fusiles y explosivos en la zona montañosa de la región, cuando intentaban atacar a agentes de la Fuerza Pública, por lo que fueron trasladados a un local del casco urbano de esa población.
El juicio público realizado la víspera se basa en la jurisdicción especial indígena que existe en Colombia y que también reconoce la autonomía a la cual apelan los nativos para tratar de expulsar de su territorio ancestral a los actores del conflicto.
Bajo ese precepto los indígenas han tratado de expulsar a grupos armados legales o ilegales de la región lo que ha causado disturbios en el norte del Cauca (oeste) y propiciado un diálogo formal con el Gobierno Nacional que arrancará este lunes.
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